Renunciar a un trabajo por correo electrónico puede ser un poco complicado. La mayoría de las veces, la forma ideal de renunciar es decirle a tu jefe en persona que dejas el trabajo.
Sin embargo, hay ocasiones en las que renunciar por correo electrónico puede ser la mejor opción. Además, aunque le digas a tu jefe que vas a dimitir, puede que quieras enviarle un correo electrónico para hacer oficial la renuncia.
Cuando escribas tu correo electrónico de dimisión, es fundamental que elijas el asunto adecuado. En este artículo aprenderás algunos consejos valiosos para dimitir por correo electrónico.
También te daré algunos excelentes ejemplos de asuntos de renuncia por correo electrónico que puedes utilizar o en los que puedes inspirarte.
Manos a la obra.
¿Cuándo se debe dimitir por correo electrónico?
Si puedes ir al despacho de tu jefe y decirle en persona que dimites, hazlo. No obstante, hay ocasiones en las que se recomienda dimitir por correo electrónico.
Trabajas a distancia
Si trabajas a distancia y toda o la mayor parte de la comunicación con tu jefe es por correo electrónico, no pasa nada por enviar un mensaje de dimisión. Programar un videochat con tu jefe puede ser recomendable, dependiendo de tus circunstancias, pero no siempre es obligatorio.
No puedes conseguir una cita
Si tu jefe está siempre ocupado y tienes que concertar una cita para verle, presentar la dimisión en persona puede ser difícil. Sobre todo si quieres que la dimisión sea efectiva inmediatamente, sin retrasos.
No te atreves a dimitir
Si te sientes demasiado tímido o tímida para dimitir en persona, pero confías en tu decisión de presentar la dimisión, no pasa nada por dimitir por correo electrónico. Lo más probable es que no vuelvas a ver a tu jefe, aunque es esencial mantener las buenas relaciones en caso de que necesites referencias en el futuro.
Te sientes incómodo con tu jefe
Si te sientes incómodo con tu jefe por cualquier motivo, anunciar tu baja por correo electrónico puede ser mejor que ponerte en una situación incómoda.
Por ejemplo, si crees que tu jefe tiene sentimientos románticos inapropiados hacia ti, puedes dimitir por correo electrónico para evitar molestias innecesarias.
Tienes que irte cuanto antes
Si surge una emergencia y tienes que dejar el trabajo e incluso la ciudad de inmediato, es posible que no tengas tiempo de presentar una dimisión más formal. En ese caso, puedes decirle a tu jefe que te vas por correo electrónico.
Los mejores ejemplos de renuncias por correo electrónico
Aquí tienes 18 líneas de asunto de correo electrónico de dimisión que puedes utilizar.
- Carta de dimisión
- Con pesar
- Dimisión
- Aviso de dimisión
- Anuncio de dimisión
- Con gratitud – Dimisión
- Dimito
- Dimisión con efecto inmediato
- Dimisión a partir de [DATE]
- Gracias por todo
- Aviso de dimisión
- Notificación de jubilación
- Por favor, acepte mi dimisión
- Dimito
- Dimisión formal
- Anuncio de mi jubilación
- Pendiente de dimisión
- Con profundo pesar, anuncio mi dimisión
Te recomiendo que añadas tu nombre al asunto, sobre todo si es corto. Puedes añadir tu nombre antes o después del asunto, separado por un guión:
- Aviso de dimisión – John Smith
- John Smith – Anuncio de dimisión
- Dimisión con efecto inmediato – John Smith
Además, puede que quieras añadir la fecha de tu dimisión, a menos que sea efectiva inmediatamente. Por ejemplo, si piensas dimitir en una fecha concreta, puedes utilizar un asunto como el siguiente:
- Dimisión – John Smith – 11 de mayo
- John Smith – Dimisión formal – MM/DD/AAAA
- Dimisión pendiente – John Smith – MM/DD/AAAA
Consejos para redactar bien el asunto de un correo electrónico de dimisión
Si no utiliza ninguno de los ejemplos anteriores palabra por palabra, utilice los siguientes consejos como ayuda para redactar su asunto.
Sea lo más claro posible
Es absolutamente esencial que seas lo más directo posible al decir que estás dimitiendo. Usar la palabra «dimisión» de una forma u otra siempre es lo mejor, pero también puedes usar frases como:
- Dimisión
- Dejar mi puesto
- Dejar mi trabajo
- Jubilación
En cualquier caso, ¡no seas impreciso! De lo contrario, es posible que un jefe muy ocupado pase por alto tu correo electrónico y nunca vea tu notificación de dimisión.
Indica tu nombre y la fecha
Si hay espacio en el asunto, añade tu nombre y la fecha, como ya he mencionado. De este modo, el gestor sabrá de inmediato quién ha enviado el correo electrónico.
Ese asunto también te servirá de referencia. Tu jefe puede guardar el correo en su bandeja de entrada y fijarse en el asunto para recordar los detalles de tu dimisión.
Incluye tu puesto o departamento
En las grandes empresas, puede ser una buena idea indicar su puesto de trabajo y/o departamento en la línea de asunto. Por ejemplo, puedes escribir algo como
- Dimisión – John Smith – Contabilidad
- Aviso de dimisión – Marketing – John Smith
- Carta de dimisión – John Smith – Agente comercial
Con tanta gente a la que dirigir, a veces puede ser difícil controlar a todo el mundo. Informar al supervisor del departamento al que perteneces puede ayudar.
Corrige tu línea de asunto
Revisa siempre el asunto del mensaje antes de enviarlo. No querrás que aparezca ningún error gramatical u ortográfico.
No solo queda mal y descuidado, sino que también puede dar lugar a malentendidos.
Además, asegúrate de que el asunto no es demasiado largo, o podría cortarse en la bandeja de entrada del destinatario. Es importante que la parte del asunto que dice «dimisión» se pueda leer sin abrir el mensaje, ya que eso llamará la atención del supervisor.
Sé conciso y profesional
Siempre es importante que los asuntos sean concisos, directos y directos. La mayoría de los ejemplos de asunto que he compartido anteriormente son relativamente breves: son los que mejor funcionan.
Además, sé profesional. Aunque tengas malos sentimientos hacia la empresa o hacia el jefe en concreto, no los expreses en tu correo de dimisión.
Por ejemplo, aquí tienes algunos ejemplos de asuntos que debes evitar:
- He terminado
- I’m Over This Company
- Odio este trabajo
- Me voy
- Gracias por nada
- Buena suerte
- El FIN
- Sorpresa
- ¡Puf! Me he ido
No querrás quemar ningún puente. No seas pasivo-agresivo ni utilices un lenguaje grosero u ofensivo.
Consejos para redactar el cuerpo del correo electrónico de dimisión
Una vez que hayas escrito el asunto, aún te queda mucho trabajo por hacer. El asunto son solo unas palabras, pero ahora tienes que redactar el cuerpo del correo electrónico para informar a tu supervisor de que dejas el trabajo.
También es fundamental redactar con cuidado el cuerpo del correo electrónico. Aquí tienes algunos consejos que debes tener en cuenta a la hora de redactarlo.
Sé educado y profesional
Como ya he dicho, no es buena idea quemar puentes. No seas negativo en tu carta de dimisión.
Hacer comentarios sarcásticos o negativos puede acarrearte problemas cuando intentes utilizar a tu antiguo jefe como referencia para un nuevo trabajo. El tono general debe ser educado y profesional, no hostil ni agresivo.
Explica por qué te vas
No siempre tienes que decirle a tu jefe por qué dejas el trabajo. Explicar con demasiado detalle por qué no te gusta el trabajo puede parecer demasiado crítico y negativo.
Sin embargo, puedes explicar brevemente en una o dos líneas el motivo de tu marcha.
Usa algo de tacto. Si te vas de la empresa, es que ya has perdido la esperanza de que las cosas cambien, así que no sirve de nada entrar en detalles sobre las cosas que te gustaría que se arreglaran.
Puedes decir que es por motivos personales o porque has decidido tomar otro camino en tu carrera. Puedes decir que has decidido buscar nuevas oportunidades o que necesitas tiempo para encontrarte a ti mismo.
Otras razones válidas para mencionar en tu email de dimisión pueden ser:
- Te trasladas a otra ciudad por el motivo que sea (estar cerca de la familia, enviar a tu hijo a un colegio mejor, etc.).
- Has aceptado un puesto en otra empresa.
- Tienes un nuevo hijo y quieres estar en casa para ayudar a criarlo.
- Has decidido jubilarte y abandonar por completo el mundo profesional.
- Te gustaría volver a estudiar y obtener un título profesional.
Algunas cosas que probablemente no quieras mencionar en tu correo electrónico de dimisión son:
- Que no te sientes valorado en tu trabajo y que has decidido irte a un sitio donde te aprecien más.
- Que no te sientes la persona adecuada para el puesto. Eso puede parecer pereza, como si prefirieras dimitir antes que trabajar en ti mismo.
- Que te rindes porque el trabajo es demasiado exigente para ti o porque no tienes las habilidades adecuadas para afrontar lo que el trabajo te exige.
- Que no te llevas bien con tus compañeros y te sientes asfixiado en el trabajo.
- Que tus compañeros no cooperan y no te permiten avanzar hacia tus objetivos o hacer las cosas.
- Que sientes que no caes bien a la gente o que no valoran tu trabajo.
- Que no estás satisfecho con los beneficios que ofrece el trabajo, ya sea el salario o las oportunidades de formación.
- Que estás disgustado porque no te han aprobado el aumento o la prima que habías pedido.
La razón por la que no quieres ser crítico en tu correo electrónico de dimisión es que es probable que el correo quede registrado en tu expediente profesional en la empresa. Cuando la gente revise tu historial en la empresa, verá tu correo electrónico, así que querrás terminar las cosas en buenos términos.
Envía el correo electrónico con antelación
Si es posible, envía el correo electrónico unas dos semanas antes de la fecha de tu dimisión. Lo normal son dos semanas, pero en algunos puestos pueden exigirte que notifiques tu dimisión con 30 días de antelación.
Enviar el correo electrónico de dimisión con antelación da tiempo a tu jefe para realizar la transición y encontrar un sustituto.
Ofrécete a ayudar
Si tienes buena relación con tu jefe, ofrécete a ayudarle en la transición. Por ejemplo, di que estás dispuesto a ayudar a tu sustituto y a enseñarle cómo funciona todo.
Incluso puedes ofrecerte a formarle o supervisarle para asegurarte de que hace bien su trabajo.
Si lo haces, tu jefe te apreciará más. También eliminará cualquier resentimiento que pudieras crear con la dimisión, y será más probable que consigas una recomendación elogiosa si alguna vez necesitas una referencia en el futuro.
Expresar agradecimiento
Siempre es una buena idea expresar tu agradecimiento a tu jefe, aunque creas que no se lo merece. Es de buena educación y te permitirá terminar las cosas en buenos términos.
Puedes decir que aprecias el modo en que el puesto te ha ayudado a crecer y a aprender nuevas habilidades, pero que has decidido que ha llegado el momento de pasar a la siguiente etapa de tu carrera y tu vida profesional. Si te ofrecieron oportunidades de formación, agradéceselo.
Habla de tus próximos pasos
Si no te vas a marchar inmediatamente, explica con detalle qué piensas hacer después en la empresa. Por ejemplo, ¿cómo vas a terminar tu trabajo?
Digamos que hay un proyecto en el que estás trabajando actualmente. Puedes prometer terminar el proyecto antes de irte.
Pregunta a tu jefe qué espera de ti en tus últimos días en la empresa. Así podrás despedirte con buen sabor de boca y dejarles contentos.
Considera la posibilidad de mantenerte en contacto
Tal vez quieras dejar la puerta abierta a otras oportunidades de establecer contactos. Puedes decir que, aunque has decidido dejar la empresa, quieres seguir en contacto y continuar estableciendo contactos con el equipo para enriquecer tus conocimientos.
No obstante, sé breve al respecto.
Utiliza un saludo y un cierre formales
Abre con un saludo formal: «Estimado Sr. Doe». Termina también con un cierre profesional y respetuoso, como:
- Respetuosamente
- Atentamente
- Saludos cordiales
A continuación, firma con tu nombre y tu firma de correo electrónico profesional.
¿A quién debes enviar tu correo electrónico de dimisión?
Envía tu correo electrónico de dimisión a tu jefe o supervisor.
Sin embargo, también deberías ponerte en contacto con el departamento de Recursos Humanos. Ellos podrán ponerse en contacto contigo para que des los siguientes pasos, como rellenar y firmar los formularios necesarios.
¿Cómo saber que ha llegado el momento de dimitir?
Ya he hablado de cuándo te conviene dimitir por correo electrónico en lugar de por el método tradicional de concertar una cita con tu jefe en persona. Sin embargo, ¿cómo puedes saber que ha llegado el momento de dimitir?
Estas son las razones más comunes por las que la gente dimite.
El trabajo es demasiado estresante y exigente
Si tu trabajo te estresa demasiado, quizá sea hora de dejarlo. Ningún trabajo merece tu salud personal y mental, y si te encuentras constantemente estresado, lo mejor es que te tomes un descanso y busques un nuevo empleo.
El estrés constante puede provocar problemas de salud física a largo plazo.
Pero no hace falta que lo digas en el correo electrónico. Limítate a decir que te vas por motivos personales.
Necesitas trasladarte
Si tienes que mudarte de ciudad, ya sea porque quieres estar cerca de un familiar mayor o porque tu pareja ha recibido una oferta de trabajo en otra ciudad, no pasa nada por renunciar por correo electrónico.
Incluso puedes decirle a tu jefe el motivo de tu dimisión en el correo electrónico, ya que no constituirá una crítica al trabajo.
Tienes una oferta de trabajo mejor
Si has recibido una oferta de trabajo con mejor sueldo y prestaciones que la actual, o incluso una con el mismo sueldo pero un mejor ambiente de trabajo o una menor carga de trabajo, no tengas miedo de renunciar. Puedes mencionar en tu correo electrónico que vas a aceptar un nuevo puesto en una empresa diferente, pero no entres en detalles sobre qué y por qué.
Tienes otros motivos personales
También está bien dimitir por una serie de motivos personales, como volver a estudiar, enfrentarse a una enfermedad, tener un nuevo hijo o simplemente sentirse insatisfecho con el rumbo que está tomando tu carrera o tu vida. En ese caso, no hace falta que especifiques nada en tu correo electrónico.
¿Cómo pedir un aumento o mejores condiciones laborales por correo electrónico?
¿Y si estás a punto de dimitir, pero quieres darle una segunda oportunidad a tu trabajo actual? Antes de dar el paso definitivo e irreversible de enviar un correo electrónico de dimisión, quizá quieras pedir un sueldo mejor, una bonificación, menos horas de trabajo o mejores condiciones laborales.
Hay una forma de hacerlo por correo electrónico. Si tu jefe o gestor deniega tus peticiones, entonces puedes decidir si quieres dar el siguiente paso y dejar el trabajo por completo.
También hay una excelente razón para enviar una petición de aumento por correo electrónico en lugar de hacerlo en persona. He aquí por qué:
- Podrás pensar y redactar tu petición de forma profesional. Podrás explicar claramente por qué mereces el aumento. Si lo pides en persona, el nerviosismo puede hacer que olvides los temas de conversación que habías pensado cuidadosamente de antemano.
- Tu jefe tendrá tiempo para estudiar tu petición y hacerte una contraoferta. Si se lo pides directamente, es posible que deniegue tu petición por defecto. Si tiene tiempo para pensárselo, es posible que se dé cuenta de lo valioso que eres para la empresa y encuentre la manera de aceptar tu aumento.
- No será incómodo. Pedir un aumento en persona puede resultar incómodo para mucha gente, así que suele ser más fácil enviar un correo electrónico con tu petición.
Aquí tienes algunos consejos para pedir un aumento o un ascenso por correo electrónico.
Sé directo sobre lo que quieres
Si no consigues lo que quieres, ya estás pensando en dejarlo, así que ¿por qué andarte con rodeos? Sé directo con lo que quieres.
Pide los beneficios concretos o el porcentaje de aumento salarial que te satisfaga. No te limites por miedo a no conseguir lo que pides.
Puede que tu jefe esté de acuerdo, deniegue tu petición o te haga una contraoferta, que puedes aceptar o rechazar.
Explica por qué mereces el aumento
No te limites a pedir un aumento: explica por qué te lo mereces. Señala tus logros en la empresa y cuánto tiempo llevas trabajando en ella.
Da ejemplos concretos de cómo has contribuido al crecimiento de la empresa. Demuestra cómo has ido más allá de los requisitos básicos de tu puesto y cómo has trabajado más para que la empresa siga avanzando.
Unos pocos ejemplos suelen bastar para demostrar por qué sería apropiado un salario más alto en función de tus contribuciones.
No hagas amenazas
Es fundamental que evites hacer amenazas sobre lo que harás si no consigues el aumento que crees que mereces. Aunque estés pensando en dejar la empresa si no consigues lo que quieres, no hace falta que lo digas en voz alta.
Poner ultimátums hará más mal que bien y puede hacer que sea menos probable que consigas el aumento que estás pidiendo.
Además, es esencial que evites ser negativo o crítico con la empresa o con tu jefe. No te quejes ni te muestres desagradecido.
Afirma que estás agradecido por todo lo que te ha dado el trabajo, pero que sientes que en este momento mereces más. Mantén un tono educado y profesional, y evita compararte con otros trabajadores.
Corrige tu correo electrónico
Tanto si escribes un correo de dimisión como uno para pedir un aumento de sueldo, revisa siempre antes el cuerpo del mensaje para evitar errores ortográficos y gramaticales.
Puedes usar el corrector ortográfico de Microsoft Word o Google Docs para comprobar si hay faltas de ortografía, o puedes usar una extensión del corrector ortográfico del navegador como Grammarly para corregir errores en Gmail.
Para terminar
Enviar una carta de dimisión por correo electrónico está perfectamente bien, pero es esencial redactar correctamente el asunto y el propio mensaje.
Sé profesional, no des demasiados detalles sobre por qué has decidido dejar la empresa y evita quemar puentes.